
Aunque varios autores discrepan sobre qué habilidades debe tener una persona para llegar a tener una buena inteligencia emocional, sí están todos de acuerdo en que los componentes de la IE hacen que la vida sea más fácil y feliz.
La IE no es simplemente una teoría, sino que se desarrolla para saber cómo se utiliza de una forma óptima y adaptativa las emociones.
Desde un punto de vista de la transformación o de habilidades, la IE se refiere al conocimiento sobre el funcionamiento de las emociones, también a la habilidad para usar este conocimiento en la vida.
Según Epstein (1998) las personas que tengan una alta inteligencia emocional tienen un pensamiento flexible,
(desde el punto de vista de la estructura del pensamiento), su forma de pensar se adaptan mejor a las situaciones, se aceptan a sí misma y a los demás, normalmente tiene relaciones satisfactorias y suelen conceder los otros el beneficio de la duda.
Por todo esto y por los beneficios que aporta la IE a ser humano, es muy importante que se empiece a enseñar (con la preparación adecuada de los profesores) a los niños desde su infancia. Gracias a que se ha comprendido la importancia que tiene la IE ya se está implantando en las escuelas. Me alegro.
Manuel J. Díaz.
Bibliografía: Fernández-Abascal E.G.y otros. Psicología de la emoción. Uned. 2010